¿Tos seca o tos fuerte? Aquí le explicamos cómo reconocer y tratar las diferencias

La tos es uno de los síntomas más comunes en todo el mundo. Pero, ¿te has preguntado alguna vez cuál es la diferencia entre una tos seca y una tos fuerte? Vamos a descubrirlo juntos.

La tos es una reacción provocada por la irritación de la garganta o de las vías respiratorias y sirve para eliminar irritantes, líquidos y flemas del sistema respiratorio. Pero la tos no siempre es igual.

Con frecuencia oímos hablar de tos seca y de tos fuerte; es esencial conocer las diferentes causas y saber reconocerlas para poder elegir los remedios más adecuados para mejorar los síntomas y aliviar las molestias.

¿Cuál es la diferencia entre la tos seca y la tos fuerte?

Los dos tipos de tos se distinguen por un elemento fundamental: la presencia de mucosidad.

• Tos fuerte: se define por una gran cantidad de mucosidad que se convierte en flema, por lo que también se denomina tos productiva.
• Tos seca: también llamada tos no productiva, ya que no da lugar a la formación de flemas.

Características y causas de la tos fuerte.

El moco es una sustancia natural que se acumula sutilmente en las vías respiratorias. Su función es garantizar la lubricación de las vías respiratorias y protegerlas de los agentes externos. Es un potente sistema de protección que ayuda a expulsar partículas o microorganismos nocivos del sistema respiratorio.

Normalmente, nuestro organismo regula la producción de moco para mantener un nivel adecuado en las vías respiratorias. En caso de enfermedades respiratorias, el organismo aumenta la producción de moco. Además, el moco se vuelve más espeso para capturar eficazmente los gérmenes.

Cuando se produce este fenómeno, se habla de flema, la presencia de moco que obstruye las vías respiratorias y que también activa la tos como forma de defensa. El resultado es una tos fuerte o productiva debido a la presencia de mucosidad, que es la forma que tiene el organismo de eliminar los agentes irritantes.

Además, la tos fuerte se caracteriza por el típico «ruido» causado por la presencia de flema, que hace que la tos suene más oscura.

La tos fuerte puede deberse a varios factores, como por ejemplo

• Infecciones respiratorias (como resfriados, bronquitis y neumonía).
• Afecciones pulmonares crónicas.
• Presencia de una afección cardiaca.

Características y causas de la tos seca.

Durante la tos seca no se produce flema. Sin embargo, la sensación asociada a esta tos es desagradable. Esto se debe a que, sin el moco que actúa como capa protectora, las células superficiales de las vías respiratorias quedan expuestas y provocan esa desagradable sensación de «picor» asociada a la tos seca.

Generalmente, la tos seca se manifiesta con fuertes inhalaciones y accesos convulsivos de tos que persisten durante mucho tiempo. En esta situación, la tos seca se produce principalmente en las vías respiratorias superiores, donde la producción de moco es limitada.

La tos seca puede deberse a varios factores, como:

• Presencia de irritantes en el ambiente.
• Asma y alergias.
• Infecciones víricas, especialmente de las vías respiratorias superiores (como sinusitis, faringitis y traqueítis).
• Reflujo gastroesofágico.

Remedios para la tos seca y la tos productiva.

Los métodos para aliviar la tos seca y la tos fuerte son diferentes porque en la tos seca la prioridad es intentar calmar la tos y reducir la irritación de las vías respiratorias, mientras que en la tos fuerte es importante ejercer una acción mucolítica para reducir la presencia de flema en las vías respiratorias, facilitando su expulsión.

- Jarabes con propiedades calmantes.

- Pastillas o sprays para la garganta con acción sedante y fluidificante: si se dejan disolver en la boca, pueden aliviar la garganta e hidratarla, muy útiles en presencia de tos seca.

- Emolientes como la miel, el glicerol, el regaliz, para reducir el picor.

- Humidificadores que mantienen hidratadas las vías respiratorias y reducen las molestias.

Existen algunos remedios, tanto naturales como farmacológicos, que pueden ayudar a tratar el problema de la tos. No obstante, ante cualquier duda o tos persistente, siempre es conveniente consultar al médico para asegurarse de que se está siguiendo el tratamiento adecuado.