Por qué es importante lavarse los oídos

Todo el mundo conoce la importancia de lavarse las manos, pero mucha menos gente conoce los beneficios de una buena higiene de los oídos. Cuidarse los oídos es esencial para su bienestar. Al igual que las manos, los oídos acumulan suciedad, bacterias y residuos ambientales que pueden afectar negativamente a la salud.

Existen muchos métodos para mantener los oídos limpios, pero uno de ellos es especialmente eficaz y recomendable: el lavado de oídos, una práctica que consiste en colocar agua tibia o soluciones salinas en aerosol en el interior de la cavidad auditiva para ayudar a su limpieza y bienestar.

El lavado de oídos puede ser realizado de forma ambulatoria por otorrinolaringólogos que, mediante una jeringa sin aguja, colocan en el interior del oído agua tibia o soluciones que ablandan el cerumen y facilitan su expulsión. Pero lavarse bien los oídos no sólo es útil contra la acumulación de cerumen, de hecho, si se descuida el oído pueden surgir problemas aún más graves como infecciones, inflamaciones y picores diversos, por lo que siempre es conveniente comenzar con una higiene a fondo, incluso a diario.

¿Cómo se lavan los oídos en casa? En casa, podemos hacer uso de sprays auriculares que nos permitan cuidar el oído a diario y nos ayuden a prevenir posibles complicaciones, evitando en la medida de lo posible recurrir a especialistas. Los sprays actúan de forma similar al lavado de oídos, pero ejerciendo menos presión, ya que la constancia y el uso diario deberían evitar la presencia de acumulaciones de cerumen o partículas más rebeldes. En definitiva, al lavar los oídos todos los días, el conducto auditivo está más aireado y limpio, ayudando también a resolver irritaciones y rojeces leves.

Los sprays a base de soluciones isotónicas, es decir, con una concentración de sales similar a la del cuerpo humano, son los más seguros y bien tolerados, ya que no alteran el equilibrio osmótico de las células. En general, estas soluciones son una opción segura y adecuada para adultos y niños para favorecer la higiene diaria de los oídos. También se pueden encontrar en el mercado sprays enriquecidos con ingredientes naturales con actividades beneficiosas específicas para la piel de los oídos, como por ejemplo el Aloe Vera, con su acción hidratante, la Manzanilla, con sus propiedades calmantes, o el aceite del Árbol del Té, con sus propiedades antisépticas, antimicrobianas y antiinflamatorias.

En todos los casos, es importante seguir la fase de lavado con un buen secado del conducto auditivo interno, utilizando una toalla suave o un pañuelo, para eliminar el exceso de agua y reducir el riesgo de que la zona permanezca húmeda durante demasiado tiempo.